El amor: un legado que permanece
CONTEXTOS
FEB 13
En el día de San Valentín te compartimos reflexiones sobre el Amor verdadero y amistad
duradera que se transforma en un homenaje al compromiso.
Para quienes hemos construido nuestros cimientos sobre principios sólidos, donde la familia
es el núcleo y los vínculos de amor y amistad son compromisos sagrados que moldean nuestra
existencia, no resulta superfluo dedicar un día para celebrar al amor.
En un mundo donde las relaciones parecen efímeras, los matrimonios de toda la vida son un
testimonio de que el compromiso y la perseverancia son la base de una familia sólida.
El amor: una virtud eterna
Definir el concepto del amor no es sencillo, pero a lo largo de la historia grandes pensadores
nos han dejado reflexiones profundas:
- Aristóteles afirmó: «El amor es como una amistad perfecta» (Ética Nicomáquea).
Para él, el amor es una forma suprema de amistad basada en la virtud, donde
se busca el bien del otro por el otro mismo. ¹
- San Agustín distinguió entre el amor terrenal y el amor divino: «El amor es la
ordenación del alma» (La Ciudad de Dios). Solo el amor orientado hacia Dios da
verdadero sentido a la existencia.²
- Erich Fromm, en El arte de amar, definió el amor como «un arte que requiere
esfuerzo y conocimiento». Para él, amar es una decisión consciente de dar,
cuidar, respetar y conocer profundamente al otro. ³
- G.K. Chesterton lo describió como «una fuerza profundamente moral y
comprometida, marcada por la voluntad y el sacrificio, más que por el simple
sentimiento o la pasión momentánea».⁴
Estas definiciones contrastan con las ideas actuales sobre el amor, muchas veces reducidas a
emociones fugaces. Es fundamental rescatar la esencia del amor como un compromiso
incondicional y generoso.
El noviazgo: un paso hacia el compromiso duradero
¿Recuerdas cómo era el noviazgo en tu juventud? Era una etapa formal y respetuosa, con el
propósito claro de discernir si se podía dar el siguiente paso hacia el matrimonio.
Hoy, muchos jóvenes ven el noviazgo como una etapa transitoria, sin compromiso ni visión
de futuro. Como padres y abuelos, tu testimonio de amor y fidelidad puede ser la guía que
las nuevas generaciones necesitan. Mostrar la belleza de las relaciones basadas en el respeto,
el compromiso y la confianza puede ayudar a los jóvenes a redescubrir el verdadero propósito
del noviazgo. Sin embargo, el día de hoy encontramos jóvenes que, fieles a los valores que
les fueron inculcados, están dando el sí.
El matrimonio: la piedra angular de la familia
No podemos idealizar los matrimonios que se formaron hace 30, 40 o 50 años, asumiendo
que todo era “miel sobre hojuelas”. La falta de comunicación abierta era uno de los
principales problemas, ya que los temas difíciles se evitaban o se trataban de manera
superficial. Además, el respeto mutuo no siempre estaba presente, especialmente en una
época en la que las normas sociales justificaban conductas autoritarias o desiguales dentro
del hogar.
Debemos recordar que el amor conyugal no se limita a la atracción romántica; implica
sacrificio y entrega mutua. Amar significa renunciar al egoísmo por el bienestar del otro,
buscar el bien común y perseverar incluso en tiempos difíciles. Frente a la cultura
contemporánea que promueve relaciones desechables, las parejas que han perseverado en
el amor y la fidelidad son un ejemplo inspirador para todos.
La familia: el primer lugar de aprendizaje del amor
Un hogar basado en el respeto, la generosidad y el perdón forma personas con una visión del
amor orientada al servicio.
El amor conyugal dentro de la familia suele estar abierto a la vida. La apertura a la maternidad
y la paternidad es una expresión genuina del amor. Defender la vida desde la concepción
hasta la muerte natural es un acto de amor profundo que reconoce el valor intrínseco de cada
ser humano.
Amistad y sociedad: construyendo comunidad con amor
El amor y la amistad se fortalecen mutuamente. Una verdadera amistad no solo edifica y
motiva, sino que también nos impulsa a ser mejores personas. Frente a una sociedad que ha
distorsionado la esencia de la amistad, necesitamos recuperar las relaciones personales,
sinceras y basadas en valores.
Cuando el amor y la amistad se viven de forma auténtica y comprometida, se contribuye a
una sociedad más justa, solidaria y respetuosa de la dignidad humana. Promover una cultura
del amor es un llamado urgente para todos los que defendemos los valores pro-vida y profamilia.
Conclusión
Te invito a celebrar este día del “Amor y la Amistad” con propósito. Más allá de los regalos
materiales, aprovecha este momento para fortalecer tus lazos familiares, renovar tus
compromisos matrimoniales y pasar tiempo de calidad con hijos, nietos y amigos.
Tú, con tu sabiduría, apoyo incondicional y años de entrega mutua, eres la esencia viva de un
amor que trasciende el tiempo. Sigue compartiendo ese valioso legado con las generaciones
futuras, sembrando un amor que edifique hogares sólidos y comunidades llenas de propósito.
El amor no es un sentimiento de felicidad. El amor es un deseo profundo de que el otro sea
eternamente feliz.
C.S. Lewis (1898-1963